Le encanta comer bandeja paisa, jugar fútbol y microfútbol y escuchar toda clase de música. A los 22 años se fue con sus padres a vivir al barrio Portal del Quindío, donde conoció a Lorena una niña de 14 años que vivía al frente de su casa, sin importa la diferencia de edades comenzaron a hablar, a salir y con el pasar de los días se enamoraron, sin pensar en las consecuencias de sus decisiones se escaparon de la casa en enero de 2006 y se fueron a vivir al barrio Llanitos de Calarcá.
En este sitio estuvieron un mes y como no tenía estabilidad económica el papá de Michael, que vivía en una finca, se los llevo por tres meses a vivir con él. Desde el día que se escaparon, la familia de Lorena la buscó por todas partes, lo demandaron a él y casi lo meten a la cárcel. La mamá de ella trato en varias ocasiones de persuadirla para que volviera a la casa pero ella estaba enamorada y estaba dispuesta a todo. Al final su familia tuvo que aceptar esta decisión y aunque muy enojados siempre apoyaron a su hija.
Mike, como muchos le dicen, al no querer depender más de su padre empezó a trabajar en artesanías, haciendo lámparas de guadua y de madera con un tío de Lorena. Aquí trabajó solo cuatro días, nada más, así que a él le pareció fácil aprender y empezó su negocio por sus propios medios.
Michael se caracteriza por ser muy trabajador y aunque trabaja de forma independiente es muy responsable, cumplido y constante. En su tiempo libre se dedica a descansar y a pasear con la familia. Ahora tiene planes de irse para otra ciudad como Medellín, pues a él y a su esposa les gusta estar cambiando y abrirse camino en otras partes. Aunque le ha tocado sudarla, Mike y su familia han crecido gracias a la guadua y el arte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario